El consumo de videojuegos en España no deja de crecer año tras año: convertir nuestro salón en un campo de batalla es una realidad cada vez más frecuente. Vivimos en una sociedad con un ritmo de vida vertiginoso que va cada vez más rápido: el trabajo, nuestras relaciones sociales… necesitamos un momento de relax y de desconexión. Y ¿qué mejor aliado que los videojuegos?

Buscando un momento de relax

Hace años la única forma de jugar videojuegos era reunirte en casa con tus amigos y pasar un buen rato pero con el tiempo las cosas han ido cambiando desde los juegos para un solo jugador a las grandes salas multiplayer en internet actuales. Y de pasar a jugar con un simple mando a tener multiples accesorios para gamers.

Esto ha roto el mito de que los jugadores eran personas solitarias: Es muy común el estereotipo de que las personas que son muy aficionadas a los videojuegos son sujetos solitarios y sin apenas vida social. Sin embargo, los videojuegos en los que pueden jugar muchas personas al mismo tiempo, e interactuar entre ellas, pueden de hecho ayudar a pasar más tiempo en contacto con amigos, ya que les permite jugar juntos cuando quieran aunque vivan lejos y aunque sea a horas intempestivas.

Los videojuegos nunca dejaron de divertirnos, pero han ido evolucionando hasta abarcar áreas como la ciencia, la educación y los deportes: los videojuegos cumplen muchos de los requisitos que una eficaz enseñanza debe contemplar, y en muchos casos lo hacen mejor incluso que nuestros actuales sistemas educativos.

Pasar un momento con los amigos

Uno de los mitos más extendidos es que los videojuegos crean personas asociales: esa afirmación no se sostiene. Los videojuegos tienen la opción multijugador y promueven la creatividad y la resolución de problemas como pueden ser muchas aventuras gráficas, que a su vez, suelen darles una mayor visión espacial y control del tiempo de la resolución de enigmas o acertijos.

Los videojuegos son una de las excusas más comunes para quedar con los amigos. Durante los últimos 10 años, las partidas multijugador en local o «de sofá» con amigos parecen haber sido desplazadas casi por completo por el juego en línea.

Sentados en un sofá o jugando a la Wii, no hay nada mejor que reunir a un grupo de amigos en casa y darle un rato a los mandos.

Todo con moderación

Sin embargo, no debemos olvidar que todo debe de tener un límite: existe más vida fuera de la pantalla. Todo lo que nos gusta en exceso puede perjudicar nuestra salud y los videojuegos no son una excepción.

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